viernes, 9 de diciembre de 2011

Victoria transforma la moda

Victor Victoria rompió con los esquemas tradicionales de lo chic para poner en boga tendencias más neutras que destacan con sutileza la elegancia de la mujer.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Victoria y su absurda realidad

Blake Edwards nos sumerge en la glamorosa ciudad luz de los años 30, una sociedad parisiense poco conservadora que no está tan alejada de las sociedades modernas, en donde hay apertura hacia ciertas manifestaciones, pero existen grupos que no están dispuestos a aceptar ciertas conductas.

Esta absurda realidad se plantea desde dos perspectivas: la primera, y el eje principal de la película, es la lucha interna de Victoria Grant, una cantante de opereta que está sumida en la pobreza y que se hace pasar por un hombre que pretende ser mujer; y King Marchan, un gánster de Chicago que no concibe el sentirse atraído por un "hombre" que según él es mujer.


Pero los rasgos arquetípicos y la doble moral de los personajes se dejan entrever al inicio de la película, cuando nos presentan a Toddy (Robert Preston), un irreverente cantante de cabaret que sostiene una relación abierta con una figura importante de la sociedad parisiense que vive en la clandestinidad su homosexualidad.

Además, está Norma, la típica intérprete de cabaret, cuyo éxito se reduce a la exhibición de su cuerpo y bailes sensuales que embelesan a los clientes de los salones estadounidenses.

La extravagancia de Edwards en este filme radica en la contradicción sobre identidad sexual y las relaciones de pareja por sobre la opinión de los demás. ¿El resultado? Una comedia utiliza las divertidas posibilidades con las que se puede tratar el tema de las preferencias sexuales.

La riqueza narrativa de la historia la encontramos en el sarcasmo y la ironía con la que Victoria confronta las ideas machistas de Marchan, quien insiste desde el principio en la farsa montada por Grant y Toddy, y al saludarla luego de su número la observa de pies a cabeza y le estrecha con mucha fuerza la mano para calcular su masculinidad y dejar al descubierto cualquier rasgo femenino para comprobar su teoría.

" - Si fueras un hombre te partiría la cara
- ¿Para probar que eres un hombre?
- Ese es un razonamiento de mujer..."





Es importante recalcar que con el supuesto noviazgo entre Victoria y Toddy, Edwards incorpora nuevamente al lenguaje cinematográfico las connotaciones sexuales entre los personajes con el llamado "male impersonation", un vínculo de camaradería con los
hombres que no pretende competir ni coquetear con ellos.


La voz y la música, herramientas maestras



Ver Victor Victoria es deleitar los oídos con jazz compuesto por un estadounidense reconocido cuya trayectoria ha quedado marcada por sus participaciones destacadas. Henry Mancini y su banda sonora, premiadas con un Oscar, fueron un elemento esencial en el desarrollo de todas las escenas.

La pieza que Edwards presenta con Victor Victoria cuenta una historia que sin la música sería imposible encaminar. La comedia musical obtuvo un ritmo adaptado perfectamente a cada uno de los sucesos que ocurrieron en las aventuras de Victoria Grant. A diferencia de un género musical, la película incluía la participación plena de la banda sonora en números representados en escenarios que permitían que el sonido, el uso de los instrumentos y la exaltación del jazz se uniera perfectamente con toda una presentación escénica combinada con bailarines y que junto con el letrista Leslie Bricusse y la voz incomparable de Victoria Grant daban aliento a la presentación. Esa combinación musical y escénica adquirían un valor increíble en el filme, la máxima expresión reflejada en los gestos de los artistas y en el sonido abarcador de la banda.


El público se cautiva desde la primera escena cuando Victoria Grant, hambrienta, pasa por las calles de París después de un pequeño casting rechazado en uno de los restaurantes de la ciudad. La música la acompaña en su tristeza y su necesidad de crecer, de obtener comida o de tener un lugar donde dormir. Es gratificante la forma en la que momentos tan sencillos como esos hasta cuando el dueño del cuarto donde ella vivía quería aprovecharse de la situación son acompañados por la música y son perfectamente moldeados con el silencio merecido que atrapa al espectador en cada escena.


La audiencia no solo ve un musical, sino que forma parte de él. Se convierte en un espacio donde el público se sumerge en los diferentes sonidos de la banda sonora compuesta por Mancini, la música incidental.


Una escena que no se puede quedar atrás es cuando Victoria decide vencer su hambre visitando un restaurante lujoso para deleitarse con el mejor platillo. ¿La solución? Poner la cucaracha encontrada en su habitación para reclamar y poder irse sin pagar. En el momento que todo sucede y el escándalo surge con todos los clientes del restaurante se capta el movimiento descontrolado de cada uno de ellos, más no el ruido causado; hecho muy significativo porque el espectador omnisciente logra captar desde fuera del restaurante como Victoria y su nuevo conocido Toddy, logran salir victoriosos de esta hazaña.

Las canciones que Henry Mancini y Leslie Bricusse compusieron son:

  • Crazy World.
  • Chicago, Illinois.
  • You and Me.
  • Le Jazz Hot.

La combinación de la banda sonora a través de los bares y escenarios y la expresión que cada personaje tiene en su momento, son también parte del desarrollo del perfil de cada uno de ellos, transportando de manera sencilla al espectador.



¿Cómo encontrar a Victoria?



Victor o Victoria (1982), dirigida por Blake Edwards, fortaleció sus escenas con diferentes elementos de la época además de basarse en la película alemana Víktor un Viktoria de 1933, dirigida por Reynold Schünzel.

Con claros referentes como el cabaret, vestuarios artísticos, musicales, la película se desarrolló y siguió floreciendo en esas expresiones, incluso en tendencias que se salieron del cine para involucrarse con la vida del público.

El desarrollo de la película, la presentación de sus personajes y todos los elementos incluidos en ella, han formado parte de un género influyente en presentaciones teatrales posteriores. Sin embargo, la dirección artística no se aplicó de la misma forma, ya que había diferentes recursos teatrales que no eran compatibles en el cine; además de ello, siguiendo con la línea cinematográfica, muchas actrices se volvieron mitos a través de trajes de hombres y viceversa, por ejemplo: Dustin Hoffman en Tootsie, Albert Nobbs con Glenn Close, (2011) entre otros.

Algunas referencias de películas donde sus personajes se transforman para poder completar su historia son:

1. ‘Tango y Cash’ (‘Tango & Cash’, 1989), de Andrei Konchalovsky

2. ‘Robin Hood’
El protagonista y Little John se transforman en pitonisas para robar el carruaje del príncipe.

3. ‘Willow’ (1988), de Ron Howard

4. ‘Mulan’ (1998), de Tony Bancroft y Barry Cook
Películas y leyendas asiáticas con muchachas que se disfrazan de hombres.

5. ‘Yentl’ (1983), de Barbra Streisand

6. ‘Con faldas y a lo loco’ (‘Some like it hot’, 1959), de Billy Wilder

Edwards, premiado por la mejor dirección artística, ha sustentado la riqueza de la película a través de los subgéneros de cabaret de cine musical contextualizado en teatros, salones, bares, alternando contextos y permitiendo que la película siga una secuencia en la que se disfruta una historia con Victoria, Toddy y King Marchand, además de la banda sonora, los vestuarios y cada una de sus presentaciones que se presentan como un show dentro de la misma película para espectadores en un teatro o en un bar y para la audiencia que está disfrutando de un musical de este estilo.

La mente maestra

Blake Edwards (1922 - 2010) fue un reconocido guionista, director, actor y productor de Hollywood.

Su carrera como guionista inició casi al azar, cuando tras modificar el guion de radio de una de sus novias cautivó a su jefe y le ofreció trabajo para escribir regularmente para la radio. Sin duda esta fue la plataforma que más tarde lo llevara al cine y posteriormente a la gran pantalla.

Sus 50 años de trayectoria respaldan la etiqueta de director de comedias por la que es reconocido, a pesar de haber recorrido todos los géneros cinematográficos.

Su pieza de consagración en el séptimo arte es "Breakfast at Tiffany's", filmada en 1961.

Entre sus producciones más conocidas están:
Y por supuesto, Victor Victoria, filme por el que recibió un Oscar al mejor guion adaptado. La primera de todas las nominaciones que se materializó.

De la claqueta...

TÍTULO ORIGINALVictor Victoria
AÑO1982
DURACIÓN132 min.
PAÍSEstados Unidos
DIRECCIÓNBlake Edwards
GUIÓNBlake Edwards (Idea: Hans Hoemburg. Un remake de Reinhold Schünzel)
MÚSICAHenry Mancini, Leslie Bricuse
FOTOGRAFÍADick Bush
REPARTOJulie Andrews, James Garner, Robert Preston, Lesley Ann Warren
PRODUCTORACoproducción EEUU-Reino Unido; Artista Management / Ladbroke / Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) / Peerford Ltd.
PREMIOSOscar: Mejor banda sonora adaptada. 7 nominaciones (1982)
GÉNEROComedia/Musical/ Romance